Con las enfermeras de mañana

El pasado 15 de noviembre estuve en el Aula Magna de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla, hablando largo y tendido ante (¡ojalá hubiera podido más con!) 200 estudiantes de 4º curso del Grado en Enfermería. Junto con Pino Quevedo Betancor, pedagoga y mediadora, ensayamos en formato amplio una forma diferente (en algunos aspectos) de realizar una presentación larga tratando de no aburrir demasiado, utilizando métodos etnográficos "en vivo". Lo cierto es que el auditorio aportó un nivel de atención excelente, haciendo muy fácil nuestra tarea, por lo que mi primer agradecimiento va hacia todos y cada uno de ellos.


Y en segundo lugar, debo agradecer a Soledad Vázquez, profesora titular del Departamento de Enfermería, su insistencia en llevarme a ese foro, porque fue muy gratificante. Y a Rosa Pérez Hernández, quien me consta que estuvo desde el principio y con entusiasmo en "la cocina" del evento. También tuve la suerte de encontrarme con un equipo docente muy comprometido y de recuperar viejas y queridas sensaciones de mi paso por el Servicio Andaluz de Salud entre los años 1985 y 1991. No ha llovido casi nada desde entonces...

La conferencia se transmitió en directo por la Televisión de la Universidad de Sevilla, y, si alguien se siente con ánimos para aguantar la casi hora y media que estuve hablando, más otros 15 minutos de coloquio, puede visionar el vídeo siguiendo el enlace al final.

Pero lo más importante es que el futuro de la Enfermería, y por tanto una parte fundamental y el verdadero alma y eje de los servicios de salud de pasado mañana, estaba allí. Dentro de unos meses empiezan a caminar como profesionales. Espero que les haya servido de algo esta visión de alguien que, sin ser enfermera, mira a la Enfermería "con ojos tiernos" (interesados y egoístas: empiezo a caminar hacia esas edades en las que será fundamental tener cerca buenas enfermeras; y cuanto mejores, mejor).