jueves, 16 de junio de 2016

Me mandaron una carta...

 

...por el correo temprano...

(Sábado, pronto por la mañana, llaman al telefonillo mientras desayuno. Es una mensajería que me entrega una carta con remite del Consejo General de Enfermería. ¿Qué hago? ¿La recibo o la rechazo? La recibo, prefiero saber lo que se prepara. En el sobre, con nota de puño y letra  –supongo–  del ínclito Francisco Corpas, director de los servicios jurídicos del citado Consejo, se dan indicaciones precisas para no demorar la entrega. ¿Pero a qué tantas prisas si el lunes me llega la misma cartita por burofax, que sí es un medio de prueba legal de su recepción? Está claro: mandar al mensajero un sábado por la mañana temprano solo pretendía (intentar) amargarme el fin de semana, castigando de paso por mis pecados a mi familia y ejerciendo una violencia moral intimidatoria indecente sobre terceras personas en mi domicilio particular, teóricamente tan inviolable como el del Sr. Corpas. Quien hace este tipo de cosas, y más pretendiendo que se trata de una actuación profesional, se ha perdido por completo el respeto a sí mismo).



...en esa carta me dicen... 

...que "cuentan" con "testigos dipuestos a prestar declaración" de cosas que nunca escribí en ningún medio y jamás dije ante ningún auditorio. Afirmar, por tanto, que se trata de una "campaña" (conjunto de actos o esfuerzos de índole diversa que se aplican a conseguir un fin determinado) solo alcanzo a explicarlo por la ingesta inmoderada de bebidas alcohólicas de alta graduación u otras sustancias estupefacientes, una conducta que sería claramente impropia de personas tan distinguidas y principales.



La carta que me mandaron

me pide contestación... 

...que explique y detalle a qué entramado y a qué concretos paraísos fiscales me refiero. Como no me he referido a nada de eso, mejor que lo expliquen ellos: a fin de cuentas serían sus Sicav, sus entramados financieros y sus paraísos fiscales, no los de este pobre mortal al que interpelan.

Y que me retracte. Ignoro de qué exactamente pero más urgente e importante sería que se retractaran ellos de esta manera indecente de defender  –esto sí queda meridianamente claro en la cartita–  "los intereses de esta Corporación y de sus órganos de gobierno". Estaría bien que detallaran, en este corrupto contexto que vivimos en el país, a qué intereses concretos se refieren. Por mi parte, ignoro de qué tengo qué retractarme, por lo que: a) es metafísicamente imposible que lo haga; b) por tanto, sólo buscan humillación y/o silencio. Pues lo tienen claro... que les vayan dando.

Pero sobre todo me amenazan. Primero, con acciones penales; es decir, con nuevas acciones penales: la mayoría de mis lectores saben que ya tengo una querella interpuesta por estos señores, por la que tuve que prestar declaración ante el magistrado hace un par de meses y que sigue su curso.

Pero también me amenazan con acciones "de toda índole": ¿qué significará, en este atemorizante contexto, "de toda índole"? ¿O qué querrán que piense yo cuando leo "acciones de toda índole"? Por si acaso es lo que pienso, hago públicamente responsables al Sr. Corpas y a quienes más puedan estar detrás de esta intolerable coacción de cualquier actuación "de toda índole" realizada contra mí o mi familia en nuestras personas, bienes o intereses.

Con respecto a la cartita, como no tengo muchas otras formas de defender mi integridad y como de no hacerlo estarían consiguiendo lo que pretenden...

...yo pido que se propague

por toda la población...






...que el león es un sanguinario

en toda generación.


Aunque yo solo sea un ciudadano de a pie, sin partido, lobby o sindicato detrás, si creen que me van a intimidar... pues sí, un poco... tienen razón. Ahora, si piensan que con estas coacciones me van a imponer lo que puedo o no pensar, decir o escribir, que sepan que han pinchado en hueso. Porque ya sabemos que, como elocuentemente dice la canción...





De esta manera pomposa
quieren conservar su asiento
los de abanico y de frac
sin tener merecimiento:
van y vienen de la iglesia
y olvidan los mandamientos,
sí.


("La carta" fue escrita por Violeta Parra contra el autoritarismo y las dictaduras disfrazadas de democracia en los años 60 del pasado siglo. Ahora, gracias a que desgraciadamente sigue vigente esta concepción elitista y moralmente violenta de la vida política, vuelve a tomar vigencia. Les dejo con ella)



18 comentarios:

  1. Juan, somos muy mayores algun dictador no nos pudo callar, crees que un melon lo va a hacer, ni de coña.
    Cuando no se tiene nada que perder,ya has ganado.
    Te robaron tanto que hasta el miedo te quitaron
    Un abrazo y animo y siempre nos queda el plan B

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    1. Mucha gracias Julio: no, no nos van a ganar, somos corredores de fondo y tenemos la razón de nuesra parte. Gracias

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  2. Vaya panda éstos del CGE! Me parece bochornoso que se chantajee a nadie por expresar opiniones y presentar argumentos...y a ésos personales les tenemos que mantener con la cuota colegial? Qué vergüenza! Ánimo Juan!

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    1. Panda... sí, vaya panda, gracias por los ánimos, seguiremos adelante

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  3. Gracias Juan por tu valentía,por expresar lo que pensamos muchas enfermeras/os,por defender una profesión que sin ella, los pacientes ( de paciencia) no se recuperarán... pues como decía Coliere (sin sic) cura sin cuidados... y que tenga que venir un sociólogo a defendernos de estos "ditactorsillos" ya es lamentable... así que mucho ánimo y si me tienes que llamar de testigo ya sabes mi email...

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    1. No es valentía, Rosarios, sólo son los genes. Como los mulos si me pinchan coceo, no hay más mérito. Gracias...

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  4. Verdaderamente lamentable, y más cuando los estamos manteniendo "obligatoriamente" entre los colegiados. ¡¡Así nos luce el pelo!!

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    1. Eso sí es chungo, que se gasten los euros que tanto os cuesta ganar en estas cosas que solo persiguen salvaguardar sus propios intereses. Alguien, algún día, les obligará a devolverlos de su propio bolsillo (espero)

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  5. Hay una cosa que aún me sigue sorprendiendo, y es la capacidad que tienen algunos para emplear recursos ajenos como si fueran propios. Será porque creen que el cargo , y por ello también la entidad, les pertenece. Un presidente o cargo de un colegio o sindicato o lo que sea, es un mero representante, una persona que ocupa temporalmente un puesto ya que así lo han decidido los auténticos duelos y soberanos de la entidad, sus miembros , colegiados o afiliados.
    Por ello, si yo insulto o atacó a las enfermeras, entiendo que el colegio utilice toda su maquinaria de asesores, abogados etc. para la defensa del colectivo a quién representan.
    Ahora bien, si yo insulto, con razón o sin ella pues eso aquí no se discute, a la persona que ocupa el cargo, no ataco a la entidad. No tiene sentido que el colegio demande y gaste un dinero y unos recursos colectivos para la defensa o delirios conspirativos de sujetos que pueden hacerlo a título individual.
    Alguien debería explicar cuánto dinero cuestan determinados actos que solamente persiguen intereses particulares.
    Si el individuo González Jurado se siente indultado u ofendido, que se pague un abogado y acuda al juzgado, y sobre todo que nos deje en paz a los demás , que ya le soportamos bastante más de lo que nos gustaría.
    Y quien dice González , dice muchos otros. Aquí en Asturias el colegio de enfermeria paga con dinero de todos anuncios en prensa para insultar a colegiados e incluso para cosas más graves.
    Juan todo nuestro apoyo y comprensión , vas por buen camino.

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    1. Gracias, Javier. Esta concepción patrimonial de lo que es de todos es lo que les define. Llevan casi 30 años apropiándose, es decir, haciendo lo que les sale de las gónadas con lo que solamente es vuestro. Pero más pronto que tarde esto cambiará. ¡Seguro! Un abrazo

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  6. Estimado Juan:

    Ante todo un abrazo fuerte para tí y tu familia, por favor trasmítelo con todo el cariño que puedo enviarte por este medio. Ni tú ni ellos merecéis una actuación tan villana.

    Es un hartazgo ver como una entidad que representa a una profesión, con una cantidad ingente de recursos se utiliza para amedrentar a ciudadanos o profesionales que pueden discutir (Y claro que pueden hacerlo)la competencia e incluso las intenciones de quienes de manera torticera se han apoderado (O apalancado de forma perpetua) de la organización en base a una mal entendida democracia, escondiéndose además (Sí escondiéndose), en burocracias absurdas, judialización, o maniobras completamente ajenas a la realidad de la profesión a la que representan.

    Finalmente he de decir que reconozco han conseguido mi expectación y curiosidad. Llevo siguiéndote mucho tiempo en público y en privado y jamás te he oido hablar de asuntos como los que se mencionan en esta terrible admonición, como si fueran asuntos de esta calaña los unicos que se necesitaran para hacer ver que hay que cambiar el modelo de representación corporativa de la Enfermería.

    ¡Qué hartazgo!

    ¡Ánimo y un abrazo!

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    1. Así es, Esteban, pero todo llegará. Y si yo, que soy un "extraño" lo ve, algún día llegarán a verlo la mayor parte de las enfermeras, pero para eso tendría que cundir el ejemplo de Asturias y también de algunos pocos otros lados y esa es la tarea más complicada. Pero llegará, seguro. Un fuerte abrazo, amigo.

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  8. Sigo sin entender como estás cosas no salen en las noticias, con las de medios y periodistas q hay!!!!!😞
    Mucho ánimo Juan!!!!

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  9. Algo asqueroso y miserable de Máximo y sus allegados.

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  10. Una vez más, lamentable que se recurra a veladas (y no tan veladas) advertencias para manejar situaciones desfavorables. Confío en que no vaya a más, aunque el daño al honor y la tranquilidad ya está hecho

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  11. Por sus formas los conoceréis, no hace falta más explicación.....una carta BOCHORNOSA, sin entrar en el contenido, simplemente por la forma de amenazar.
    (¿estos son los que supuestamente nos representan y velan por nuestros intereses? OMG)

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  12. Hola Juan:

    Yo no soy enfermera, sino sociólogo como tú y desde hace mucho tiempo llevo aprendiendo muchísimo sobre la profesión enfermera con tus trabajos. Sólo quería escribirte para expresarte todo mi apoyo: creo que no sólo haces un trabajo sociológico estupendo, sino que a mí entender el rigor con el que lo llevas a cabo hace que cobre sentido una actividad como la sociología (algo que no sucede todos los días). Y pese al mal rato que esta situación te está generando, creo que es la mejor prueba de todo el sentido que tiene tu compromiso con la enfermería.

    Un abrazo fuerte, Pablo.

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